Choque de bolas de marfil



Los ojos oscuros de Mario se pierden en el vacío como si fueran portadores de una sentencia por cumplir. Sale de sus pensamientos al escuchar al fondo chocar las bolas de billar. Dos jóvenes están jugando, uno de ellos lleva las mangas del jersey remangadas. En un antebrazo una R mayúscula tatuada.


Al fondo en la sala de billar se ven cuatro jóvenes jugando, uno de marcados rasgos calés, rostro moreno, pelo liso largo cayéndole por las mejillas, también ve Mario a otro joven alto y moreno habitual del billar, está apuntando con el palo de billar a una bola lejana mostrando una R grande tatuada en el antebrazo.

Sombras del ayer 

Comments

Post a Comment

Popular posts from this blog